Justicia ecológica, social y formativa: Pilares para una educación sostenible y transdisciplinaria en la región

Tras participar de la reunión Red-EDS2030 para América Latina y el Caribe, organizada por UNESCO, reflexionamos sobre los desafíos que enfrenta la región para alcanzar una educación con miras al desarrollo sostenible y a ecologizar la educación. La puesta en valor de saberes locales, la conciencia ecológica sobre la crisis climática y los riesgos de desastres naturales, así como la consideración de las brechas territoriales, fueron algunos de los temas abordados.

Representantes gubernamentales, ministerios de educación, organizaciones de la sociedad civil e investigadores de 24 países de América Latina y el Caribe, fueron parte de la primera reunión Regional de la Red-EDS2030. El encuentro buscó transformarse en una instancia para reflexionar y construir una hoja de ruta hacia una educación enmarcada en el desarrollo sostenible.

Cinco ejes fueron considerados como prioritarios para este encuentro: promover políticas; transformar entornos de aprendizaje; desarrollar las capacidades de docentes y educadores; empoderar a las juventudes; y acelerar las acciones a nivel local. Durante dos jornadas, diversos representantes de la región conocieron sobre las realidades particulares de las naciones participantes, al tiempo que compartieron visiones comunes, tales como la necesidad de tres condiciones indispensables para el desarrollo sostenible en contextos formativos: justicia social, ecológica y educativa.

Asimismo, se reflexionó sobre algunas de las problemáticas transversales del territorio, tales como las brechas sociales, la precariedad, la salud mental, la inseguridad e incluso temas relativos a necesidades básicas, como la nutrición. En esta línea, se enfatizó en que estas carencias están vinculadas entre sí como síntomas de la crisis socioecológica que afecta al planeta.

Escuelas más resilientes y transdisciplinarias

En el encuentro expuso nuestra encargada de Aprendizajes, Amparo Irarrázaval, quien dio a conocer experiencias formativas que tienen lugar al alero de Fundación Mar Adentro. Entre las iniciativas que presentó, destacó el rol del programa Docente Activo, el cual busca generar conciencia sobre el valor de la educación socioecológica dentro y fuera del aula, así como generar experiencias para ampliar y diversificar el rol de los docentes a la hora de enseñar sobre conservación de la naturaleza desde una perspectiva transdisciplinaria.

Docente activo 2023

Al respecto, señaló Irarrázaval, como fundación “es importante reconocernos en el marco de que impartimos programas de educación no formal, perspectiva que nos da flexibilidad sin perder de vista el currículum escolar”, y manifestó la importancia del cuidado y del bienestar no sólo de los estudiantes, sino de los docentes en su labor de formación integral. De la misma manera, enfatizó en la mirada particular de la fundación en cuanto a la importancia del arte como “una herramienta para generare conocimiento”.

En la misma línea, nuestra directora de Aprendizajes, Manuela Méndez, quien también fue parte del encuentro, relevó la necesidad de impulsar la formación de la sensibilidad de los estudiantes y los profesores en vínculo con la estética. “Observamos la importancia de aprender-haciendo, ya que muchas veces no es posible comprender sin poner atención a partir de los sentidos y las experiencias a través del cuerpo”, expresó.

Tras el encuentro, ambas reflexionaron sobre las direcciones centrales para incentivar la toma de conciencia respecto de que la crisis socioecológica es un factor determinante del presente y que, por lo tanto, impacta en el ámbito educativo como parte de una realidad social que afecta principalmente a países con altos índices de desigualdad. 

En este sentido, explicaron, uno de los mayores riesgos se relaciona con los desastres naturales, ya que en el contexto actual de cambio climático los eventos meteorológicos extremos que los generan son más frecuentes, y afectan directamente la calidad de la educación, pues a menudo implican el cierre de escuelas por períodos prolongados o impiden tener condiciones óptimas para los procesos de enseñanza-aprendizaje.

Docente Activo 2023

Ante esta realidad, existe la necesidad de fortalecer el trabajo intersectorial; el acceso de las comunidades educativas a material educativo con pertinencia territorial; el desarrollo de competencias, así como el empoderamiento y la resiliencia climática. Al mismo tiempo, se vuelve crucial apoyar iniciativas de sustentabilidad y cambio climático que han surgido desde las comunidades educativas locales; generar capacitación docente y escuelas más resilientes que funcionen como potenciales refugios ante desastres.  

En términos más generales, señalaron, el encuentro también contribuyó en aunar criterios para abordar la educación con foco en el desarrollo sostenible, no sólo en función de los tres pilares de justicia ambiental, educativa y social, sino también desde una mirada transdisciplinaria incorporada en la formación y la gestión.

Irarrázaval explicó que se observó la necesidad de entablar “comunicación entre las instituciones en línea con un trabajo intersectorial entre los ministerios, así como considerar los saberes locales de los territorios en los procesos de formación, lo cual se relaciona con incorporar diversos tipos de conocimiento que apunten a la co-construcción de un futuro posible, ante la urgencia de la crisis socioecológica”

Méndez, en tanto, aseguró que si bien el concepto de educación ambiental, en un comienzo, fue vinculado principalmente a la conservación con foco científico, “hemos comprendido que coexisten componentes multidimensionales. Sólo a través de la transdisciplina es posible investigar futuros posibles y, al mismo tiempo, la forma de llevar a la práctica esta perspectiva, se puede dar a través del arte como puente para conectar conocimientos”.

Sobre las proyecciones de la reunión, manifestaron, se buscará conducir el debate para establecer una alianza hacia una educación para el desarrollo sostenible que considere como base la calidad de la formación. Así, una educación de calidad, no sería circunstancial, sino que atravesaría y le daría sentido a la sostenibilidad a la que se busca apuntar. En la misma sintonía, esta alianza también se orientará hacia aprendizajes para la acción climática, incorporando aristas como la adaptación y la resiliencia en las escuelas y sus comunidades educativas. 

Este encuentro fue organizado por la Oficina Regional de Educación para América Latina y el Caribe (OREALC/UNESCO Santiago). Entre sus objetivos se buscará generar un documento que refleje el contexto regional sobre la EDS de cara a la Reunión Global de la Red EDS 2030 que se realizará en Tokio, Japón. Puedes conocer más detalles AQUÍ.